Reclamar vuelos puede ser un proceso complejo, así que evitar errores comunes puede marcar la diferencia a la hora de que tu demanda prospere (o no).
Por eso, hoy repasamos algunos errores típicos y cómo puedes sortearlos para mejorar tus posibilidades de éxito. Desde nuestra experiencia como abogados para reclamar vuelos, creemos que marcará la diferencia.
La importancia de documentar problemas de vuelo:
Uno de los errores más frecuentes al enfrentarse a problemas de vuelo es no documentar adecuadamente lo que te ha pasado.
La falta de pruebas puede dificultar mucho la verificación de tu reclamación. Si pasan cosas como problemas de retrasos significativos, cancelaciones inesperadas o pérdida de equipaje, es esencial recopilar evidencia.
Para ello, si quieres aplicar sólo un consejo, que sea este: haz fotos de la información, guarda correos electrónicos de la aerolínea y, si es posible, obtén declaraciones por escrito del personal del aeropuerto. Todo lo que puedas aportar ayudará, y nunca resta.
Documentar adecuadamente los problemas de vuelo no solo es una buena práctica. Es el primer paso para una reclamación que genere una devolución rápida y sin problemas. Y es que la evidencia tangible respalda tu caso y proporciona a las aerolíneas (o al juez) la información necesaria para evaluar y procesar tu reclamación de manera eficiente. No lo pases por alto, pues es un error común. Veamos otros y cómo evitarlos.
No documentar problemas después del propio hecho:
Otro de los errores más frecuentes al enfrentarse a reclamaciones de vuelo es no documentar adecuadamente las comunicaciones posteriores o cualquier cosa que pase tras el percance. Pase lo que pase, digan lo que digan, guarda todo. Tanto si es durante o después del evento, siempre será de utilidad para reforzar tu caso.
Desconocer tus derechos y compensaciones posibles:
Muchos pasajeros no conocen sus derechos y las compensaciones disponibles al enfrentar contratiempos en vuelos. Antes de presentar una reclamación, consulta a un experto sobre las regulaciones y políticas de la aerolínea. Entender qué puedes exigir en términos de reembolsos, compensaciones o alojamiento puede fortalecer tu posición durante el proceso de reclamación.
No reclamar dentro del plazo establecido: no lo dejes ir
También es vital presentar tu reclamación dentro de los plazos establecidos. Las regulaciones varían según la región y el tipo de problema, pero retrasarse en la presentación puede resultar en la pérdida de derechos. Asegúrate de priorizar el asunto, y pon en marcha tu reclamación cuanto antes.
Proporcionar información incorrecta: cuida los datos
Errores en la información proporcionada en tu reclamación pueden ser muy pero que muy perjudiciales. Verifica y asegúrate de que todos los detalles sean precisos. Desde fechas y números de vuelo hasta la descripción del problema, la precisión es clave para una reclamación exitosa. Si no, las compañías se aferrarán a cualquier detalle para evitar sus responsabilidades.
No buscar asesoramiento profesional: consulta con expertos
Algunos pasajeros no buscan asesoramiento profesional, lo cual puede ser un error muy caro. En casos complejos o disputas prolongadas, es importantísimo recurrir a servicios legales o plataformas especializadas en reclamaciones de vuelos. Te daremos orientación experta, lo que aumenta tus posibilidades de conseguir una compensación justa.
No mantener una comunicación clara con la aerolínea: transparencia y persistencia
La falta de comunicación clara con la aerolínea suele obstaculizar el proceso de reclamación. Mantén un registro de toda la correspondencia y sé persistente en la búsqueda de actualizaciones. La transparencia en tus interacciones puede agilizar el proceso y mejorar la comprensión mutua.
¿Qué significa esto, de forma más sencilla?Que les pidas las cosas con claridad, por escrito y por las buenas, indicando que llegado el caso, reclamarás. Y si eso no funciona, reclames.
Evitar estos errores comunes puede mejorar muchísimo tus probabilidades de éxito al reclamar vuelos.
Recuerda que la información es poder, por lo que guarda todo lo que veas, hagas o te hagan, de manera que luego puedas utilizarlo para respaldar tu reclamación. Si se han vulnerado tus derechos, reclamar es la mejor opción. Con nosotros, no tienes nada que perder pero sí mucho que ganar.